Alfombras de yute: el toque veraniego que podrás disfrutar todo el año

Lo cierto es que las alfombras son un complemento decorativo versátil, ideal en cualquier época del año. Es verdad que durante el verano, la clave está en elegir materiales ligeros y livianos, que aporten frescura y hagan que los ambientes se vean más acogedores. Pero ¿por qué cambiar de alfombra con cada estación? Los diseños de fibras naturales como el yute son también una opción perfecta para los meses más fríos del año. Y es que son muchos los motivos para vestir los suelos con alfombras de yute. Por eso, para ayudarte a sacar partido a su belleza y funcionalidad, aquí tienes algunos consejos y buenas ideas decorativas que seguro te inspiran a la hora de vestir los suelos de tu casa.

Cómo elegir tu alfombra de yute

Lo primero que debes considerar son las dimensiones de la estancia donde vas a colocarla. Si se trata de un salón o un dormitorio amplio, un modelo XXL puede ser ideal para cubrir el área a modo de moqueta y crear sensación de continuidad. En cambio, en habitaciones más pequeñas, lo suyo es que la alfombra tenga un tamaño proporcional a la zona que deseas cubrir para evitar recargar visualmente la estancia.

En cuanto a cómo funcionará con resto de la decoración, será difícil que te equivoques. El yute es una fibra natural que tiene un atractivo estético único. Su textura tejida añade un toque orgánico a la decoración y contribuye a realzar el estilo de cualquier espacio. Porque si bien es cierto que, normalmente las asociamos a interiores rústicos, las alfombras de yute encajan con cualquier propuesta decorativa. Sus tonos naturales son perfectos para recrear atmósferas armónicas, serenas y elegantes, aunque también es posible encontrar diseños teñidos con colorantes especiales para darle un toque más dinámico a la decoración.

Otro factor que, sin duda, tendrías en cuenta en el momento de escoger una alfombra es el material y acabado del suelo. Bien, las alfombras de yute encajan perfectamente en todo tipo de pavimentos (madera, laminados, baldosas, microcemento…). Lo mismo que el color. Si tienes un suelo claro, una alfombra de yute, con su tono natural y cálido, proporcionará un suave y agradable contraste, nada abrumador, mientras que si es oscuro, creará un equilibro visual, además de ayudar a iluminar el espacio, hacer que se vea más amplio y luminoso.

Sobre estas líneas, el salón que IMediterránea proyectó en la tienda de Gancedo en Madrid, con el suelo vestido con una alfombra de yute de la firma textil.

¿Lisas o con patrones?

Además de los tradicionales diseños lisos y sencillos, encontrarás alfombras de yute en una amplia gama de opciones con diferentes patrones: desde modelos trenzados hasta diseños geométricos como espiga y rombos. Así, Gancedo cuenta con el modelo Rombitos que ves sobre estas líneas.

Esta variedad permite adaptar las alfombras de yute a diferentes ambientes y estilos decorativos, así como agregar un toque único y diferente a cada estancia. Una alfombra lisa es perfecta para decoraciones de estilo minimalista, rústico y nórdico, donde se busca crear una atmósfera relajada y natural. Si eres más de interiores modernos, contemporáneos o eclécticos, donde la idea es sumar diseño y carácter a la decoración, decídete por un modelo con patrones.

¿Y si colocas dos alfombras superpuestas?

Como comentábamos al principio de este artículo, las alfombras de yute funcionan en cualquier época del año. Durante el verano, aportan frescura a los ambientes, mientras que cuando llegan los meses más fríos del año contribuyen a crear espacios más acogedores.

En invierno, si queremos dotar a los ambientes de un toque de calidez extra, queda muy bien colocar dos alfombras superpuestas. Eso fue lo que hizo Pete Bermejo en este ambiente de la tienda de Gancedo en Madrid. El interiorista combinó dos alfombras de la firma: un modelo de animal print y otro de yute natural que matiza el efecto arriesgado del patrón de leopardo y aligerar el resultado final.

Y por cierto, ¿sabías que desde tiempos ancestrales se han empleado las fibras vegetales para embellecer tanto suelo como paredes? Es más: las esteras artesanales típicas de Andalucía, Baleares, Cataluña o Canarias, que originalmente se utilizaban como alfombras y persianas, son precursoras de las modernas alfombras de fibra que hoy en día decoran nuestros hogares. Es fascinante cómo estas tradiciones han perdurado y evolucionado a lo largo del tiempo, llevando consigo la esencia artesanal y la herencia cultural de generación en generación.